El diputado Gabriel Vilche (PRO) dio detalles en el segmento En Cámara sobre su iniciativa que pretende adherir a la ley nacional pero agrega específicamente un registro de cuántos desfibriladores hay en Mendoza y en qué estado se encuentran.
Lo presentado por Vilche estipula la adhesión a la ley nacional 27.159, cuyo objetivo es regular “un sistema de prevención integral de eventos por muerte súbita en espacios públicos y privados de acceso público a fin de reducir la morbimortalidad súbita de origen cardiovascular”.
Es que, según explica el diputado “la morbimortalidad súbita de origen cardiovascular es una de las principales causas de muerte en todo el mundo y nuestra provincia de Mendoza no es ajena a ello”, pero además la esperanza de salvar a una persona que sufre un episodio de paro cardiovascular aumenta mientras más rápido y eficientemente se intervenga.
“Si se actúa dentro de los 5 minutos de ocurrido el episodio las posibilidades de sobrevida ascienden al 40 por ciento, pero después de los diez minutos, la posibilidad de sobrevida es prácticamente nula”.
En este sentido es que se fundamenta en el proyecto que señala que “lo cierto es que en virtud de los sistemas sanitarios instalados en la provincia de Mendoza, como en el resto del país, y debido a las grandes distancias que deben recorrerse, resulta en prácticamente una imposibilidad que cualquier paciente que sufre este tipo de evento pueda recibir la adecuada atención médica (desfibrilación) en menos de 10 minutos” y en ese sentido es que se propone legislar para que haya acceso a los desfibriladores.
Además de la adhesión, el proyecto presentado en Diputados de Mendoza agrega para el territorio provincial la generación de un “registro provincial de desfibriladores externos automáticos disponibles” que deberá contar con datos referidos a la geolocalización, año de fabricación, estado de conservación y funcionamiento, última verificación técnica realizada por profesional y/o Institución habilitada y toda otra información que se considere necesaria.
Según el autor los lugares públicos de la órbita estatal deberán ser dotados de estas máquinas y los lugares de acceso público pero de órbita privada se les exigirá que los adquieran.
Complementariamente se agrega que la capacitación de la mayor cantidad de personas sobre resucitación cardiopulmonar es el complemento absolutamente necesario para el uso de desfibriladores.
“Se requiere de una adecuada capacitación en los colegios y para la sociedad en general en RCP” para poder combinar las técnicas con el uso del desfibrilador si fuese necesario, completó.