{mosimage} Establece los pasos que un profesional de la salud debe seguir para atender a una paciente e incluye criterios de atención psicológica, física y farmacológica
La Cámara Baja dio media sanción a una iniciativa de la diputada Mirta Díaz (FISCAL) que establece la adhesión de Mendoza a un protocolo nacional de atención hospitalaria a mujeres que sufren complicaciones luego de un aborto.
Esta iniciativa está destinada a respetar el derecho a la atención médica de las mujeres y contiene una guía con los pasos que un profesional de la salud debe seguir para atender a una paciente que llega con daños producidos por la interrupción de un embarazo.
El protocolo estipulado por el Ministerio de Salud de la Nación, incluye criterios de atención psicológica, física y farmacológica que se deben aplicar en estos casos.
La guía contenida en el protocolo cuenta con el apoyo de la Sociedad de Obstetricia y Ginecología de Buenos Aires, el Centro de Estudios de Estado y Sociedad, el Centro Latinoamericano de Salud y Mujer y la Sociedad Argentina de Salud Sexual y Reproductiva, entre otras instituciones.
Según afirmó la diputada Díaz, la adhesión a esta guía es necesaria por el alto grado de discriminación que sufren las mujeres que ingresan a un hospital luego de padecer complicaciones tras un aborto llegando a veces a “ni siquiera ser atendidas por médicos” por haber interrumpido el embarazo.
Estos hechos de discriminación serían sufridos “principalmente por mujeres que por su condición socioeconómica dependen del sistema público de salud” dijo Díaz.
“Hay una realidad, que en nuestra provincia hay mujeres que mueren por abortos” sentenció luego la legisladora.
La diputada expresó además que “una política de salud reproductiva implica más que el mero suministro de anticonceptivos” y luego opinó que el número de atenciones en hospitales públicos por complicaciones relacionadas con abortos “está indicando que las políticas en salud reproductiva no son efectivas.
La iniciativa fue aprobada con el apoyo de todos los bloques, aunque los diputados demócratas Diego Arenas y Mario Casteler hicieron contar su voto negativo.