Se desarrolló la Jornada sobre “Juicios por delitos de Lesa Humanidad”, organizada por el diputado, Néstor Piedrafita, y la senadora Alejandra Naman, ambos del ARI, en el Salón de los Pasos Perdidos de la Legislatura provincial. Participaron como panelistas: Omar Palermo, Fiscal General Federal; Miriam Zambrini, presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, y Ernesto Suárez, actor, director teatral y ex exiliado.
El foro comenzó con las palabras de Alejandra Naman, la cual comentó el por qué de la organización del mismo. Manifestó que “ha comenzado una época histórica en la Provincia, donde se comienza a cerrar un ciclo a través de la justicia”. Agregó que esta asamblea se realizó por la memoria, la justicia, por los que están y por los que no están.
A continuación se proyectaron dos audiovisuales ilustrativos. El primero llamado “Destinos”, que contaba la historia de dos amigos que después de 10 años se tuvieron que enfrentar con una situación difícil como una dictadura en dos posiciones distintas. La dirección y el guión estuvieron a cargo de Mabel Toledo. El segundo corto, realizado por estudiantes de la Universidad Nacional de Cuyo, llamado “Homenaje a Madres y Abuelas de Plaza de Mayo”, mostró una recopilación de imágenes de los años de la dictadura y de la lucha de las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo.
Acto seguido hizo uso de la palabra Omar Palermo, quien contó la historia del Caso Silvia Campos y puntualizó que “esto pasó en Mendoza, y tiene nombre y apellido”. Se manifestó optimista y dijo que a pesar del dolor es un buen momento para la Provincia. La parte emotiva del foro estuvo a cargo de Miriam Zambrini, quien comentó sobre lo vivido en San Rafael en estos 4 meses y medio del primer Juicio en la historia en Mendoza. La frase que marcó su discurso fue: “Los testimonios de cada uno de los afectados fueron sanando profundas heridas”. Aclaró que “nadie después de lo vivido en estas sesiones es el mismo, nosotros ya hicimos nuestra condena social”.
Luego se vivió un momento de distensión cuando el actor, Ernesto Suárez, recordó momentos alegres de una época difícil, “cuando me estaba yendo de mi casa, al exilio, mi mujer había preparado una sopa, cuando la vi le dije “chau sopa, te tomo a la vuelta”. Finalizó diciendo que “hay que animarse a cambiar el punto final por una coma”.
El foro finalizó con la palabra de la senadora Naman, quien agradeció íntegramente a María de Domínguez, una Madre de Plaza de Mayo de Mendoza, por enseñarle día a día que la fuerza y la fe es lo último que se pierde. Entre lágrimas hizo extensivo el agradecimiento a todos los que participaron del foro.