El ministro de Seguridad, Carlos Aranda, junto a parte de su gabinete, presentó ante las comisiones de Hacienda de ambas Cámaras legislativas la pauta presupuestaria prevista por esa cartera para el ejercicio 2013.
Lo presupuestado para el próximo año asciende a los 1.543.236.108 pesos a los que se suman otros 3.647.891 correspondientes a la Inspección General de Seguridad (que no incluye personal porque ya esta incorporada a la propiamente dicha del Ministerio), lo que hace un total para Seguridad, de 1.546.883.999 pesos.
Aranda explicó que sin tener en cuenta la IGS, de los más de 1.543 millones de pesos de su cartera el 95% se va en gastos corrientes en los que está contemplado el gasto en personal (con un 85,65% de estos recursos), en tanto que el 5% restante lo absorben los bienes de capital.
Los servicios generales se llevan el 2,14 por ciento, convenios el 1,19%, las locaciones de servicio el 0,30%, los servicios públicos, el 0,97%, los bienes corrientes, el 4,56% y las erogaciones reservadas el 0,39%.
El funcionario, indicó en tanto que si se tiene en cuenta el presupuesto votado en 2012 para el Ministerio, que fue de 1.167.791.440 pesos, y se lo compara con el presentado por el Ejecutivo para 2013, se observa un incremento del 32,15%. Sin embargo, aclaró que el presupuesto ejecutado 2012 proyectado al 31 de diciembre de este año incluyendo el pago de aguinaldos, fue de un 11,73% más del votado por los aumentos salariales que no estaban incluidos en la pauta de 2012.
Así, comparativamente entre el ejecutado durante 2012 y el proyectado para 2013, en personal se observa un aumento del 9,75%; en bienes corrientes una suba del 25,43%, en convenios, casi un 20% más y en locaciones de servicio un 3,08% también en más, entre otros conceptos.
En tanto, los bienes de capital presentan un incremento del 71,72%, incluyéndose aquí la compra de elementos que son parte de las herramientas de trabajo de la policía, como móviles, chalecos y equipamiento en general.
Dentro de los recursos destinados a servicios generales, se ha previsto un 22% para comunicación y mensajería. Esto es, inversión en la transmisión de datos de las cámaras de seguridad y el servicio TETRA “para que lleguen a otros lugares donde hoy no estamos”, en tanto que un porcentaje similar será destinado a gastos de publicidad, en las distintas campañas de concientización que lleva adelante el Ministerio.
En lo que hace a bienes de capital, que contará con un total de aproximadamente 74 millones de pesos, el 12,97% será para chalecos antibalas– se ha proyectado la compra de alrededor de 2500 para el personal policial -; el 1,40% para elementos de medición como los alcoholímetros; el 46,55% para rodados – Aranda indicó que se estima comprar entre otros, unos 40 patrulleros y 18 camionetas 4x2 -; un 2,55% para la compra de armas, fundamentalmente 9 milímetros y escopetas 12.70, y un 26,95% para la tercera, cuarta y quinta etapa de video-seguimiento, que son las cámaras de seguridad que se harán extensivas a las zonas sur, este y el Valle de Uco.
Asimismo, Aranda indicó que se ha previsto incorporar 625 efectivos a la fuerza policial, pero aclaró que “hay un equilibrio entre los retiros y las incorporaciones”.
Los planteos de la oposición giraron en torno a los gastos en personal y si estaban incluidas las incorporaciones previstas para 2013, la cantidad de balas que utilizan los efectivos en las prácticas de tiro y en el combate del delito, y los lineamientos generales del plan de seguridad.
Según sostuvo el funcionario provincial, “todos estamos de acuerdo en que los problemas de la seguridad son multicausales y que no sólo se resuelven desde el Ministerio de Seguridad”.
También se lo consultó sobre la incidencia del consumo de drogas en el delito y si hay articulación con otros Ministerios como el de Salud y Desarrollo Social en esa materia.
Finalmente, el diputado radical Luis Petri, señaló que comparativamente con los presupuestos de los últimos diez años, el propuesto para 2013 es el más bajo, a lo que el ministro respondió que “lo más importante es que a partir de 2007 – 2008, se tomó conciencia que la seguridad es un problema multicausal” y que por ejemplo, si bien la erradicación de villas, o la atención de las adicciones, son un factor que impacta en seguridad, “nosotros no tenemos que poner recursos porque dependen de otras áreas”.
“Lo prioritario es que adoptamos el tema como una política transversal del gobierno” por tanto lo que se hace desde transporte, educación o desarrollo social “colabora y mucho en lo que hace a seguridad”.
“El tener más móviles o más chalecos de ninguna manera garantizan resultados”, apuntó, y agregó que “el dinero no es la fórmula sino que tiene que ver con la política integral de seguridad”.
Prensa diciembre 13