Por iniciativa de Marcos Niven (PD), la Cámara de Diputados rindió un homenaje a Marcelino Altamirano, quién falleció este fin de semana y fue el fundador de la “Casa Puente Afectivo” que rescataba a chicos de la calle.

En los fundamentos del proyecto el legislador demócrata solicitó que el Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes, imponga el nombre de “Marcelino Altamirano” en  algún efector (guarderías, hogares, o comedores infantiles, etc.) dependiente de esa área.

Cabe destacar que Altamirano funda en el año  2000  la “Casa Puente Afectivo”  en Guaymallén y, con la ayuda de empresarios mendocinos, se dedica a rescatar chicos en situación de calle y ensañarles un oficio. Con su trabajo solidario se transforma en un consejero espiritual y de vida de estos niños y adolescentes en estado de vulnerabilidad, considerando que con amor y contención pueden tener una mejor calidad de vida. A tal punto, que el 70% de quienes pasaron por esa casa – hoy ubicada en Maipú -, se reinsertó social y laboralmente, según consta en el proyecto.

Durante la sesión y con la presencia de quienes de ahora en más estarán al frente de  la “Casa Puente Afectivo”, desde las distintas bancadas las diputadas Beatriz Varela (UCR) y Sonia Carmona (FPV), destacaron la obra solidaria de Altamirano, quien con perseverancia logró dar esperanza y perspectivas de futuro.

Por su parte el presidente de la Cámara de Diputados, Néstor Parés recordó que “cuando era funcionario del Registro Civil, Marcelino se acercó a solicitarme que casara a una pareja que vivía en la “Casita”. Este casamiento se llevó a cabo y hoy Pamela está acá, con sus dos hijos, para continuar la obra de Altamirano”.