La comisión de Salud Pública, que preside Hebe Casado (PRO), continuó el análisis de un proyecto, que cuenta con media sanción del Senado de Mendoza, a partir del cual se crea el Programa Provincial de Salud Ocular y Prevención del Glaucoma. La reunión se desarrolló a través de plataformas electrónicas y contó con la participación de Fernando Fuentes, oftalmólogo e integrante de la asociación mendocina de esa práctica médica.
Consultado el profesional por la oportunidad de llevar a cabo la creación de este Programa, sostuvo que “siempre los proyectos que tienden al diagnóstico precoz de las enfermedades” son válidos y necesarios, “el tema es cómo lograr el mejor uso de los recursos y tener impacto importante a nivel de prevención de la patología”, agregó.
Fuentes focalizó en la población de riesgo que está contemplada en el Programa que propone el expediente, ya que por diversos estudios obligatorios de salud a personas con poco tiempo de vida desde su nacimiento, por diversas patologías, pueden detectárseles estas afecciones.
En cambio, el oftalmólogo hizo hincapié en la “prevalencia del Glaucoma Crónico Simple”, que es uno de los más peligrosos “porque prácticamente no da síntomas hasta que ya es demasiado tarde, y este es mucho más frecuente a partir de los 40 años. Entonces, la población en la cual uno puede tener impacto positivo en la detección de pacientes suele ser esa: mayores de 40 años, sin sintomatología previa y que son pacientes que no concurren a la consulta y no se les detecta, porque la toma de presión es parte de la práctica oftalmológica habitual; por eso las campañas tienen un muy buen impacto en ese tipo de pacientes”.
A raíz de estas palabras, y profundizando en el estudio, los legisladores participantes indicaron que realizarán un despacho mejorado del mismo, al realizar las correcciones que apunten a abarcar de manera preventiva a la mayor cantidad de población que pueda ser afectado por esta patología; para ello, se solicitarán aportes a la Sociedad Mendocina de Oftalmología y un informe del Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes de la provincia, con el objeto de lograr alcances también en el seguimiento y tratamiento de la enfermedad.
Asimismo, Fuentes explicó que todos los años “el Consejo Argentino de Oftalmología lleva a cabo una campaña de detección de glaucoma anual, que es gratuita”, en la que se ponen a disposición recurso humano y económico, más todos los elementos necesarios para la detección de esta patología con los estudios de “presión ocular y fondo de ojo”. Por lo tanto, “sumarse a esa campaña, me parece que está bueno, da resultados positivos, se detectan muchos pacientes”, remarcó.
Por su parte, indicó que no solamente queda en la detección el procedimiento, sino que hay que realizar el seguimiento y tratamiento de los pacientes a los cuales se les detecta la patología y que en ello se debe trabajar, entre otros puntos, para que las áreas de salud pública cuenten con aparatología específica como son los “Campímetros” y medidores de presión ocular.
A modo de ejemplo recordó que un campímetro tiene un costo aproximado de 20.000 dólares, algo que es elevado para las instituciones, pero con la salvedad de que si se cuenta con estos aparatos puede realizarse la detección, seguimiento y tratamiento del paciente, mejorándole la calidad de vida, “y no quedándonos a mitad de camino”.
En base a la consulta sobre los costos para el tratamiento, repasó que muchos de los casos juveniles “son quirúrgicos” pero como es el menos frecuente, prefirió referirse a los casos de “glaucoma crónico de ángulo abierto” que son los casos que presentan la mayor cantidad de pacientes. En este último, el tratamiento se realiza con gotas y/o láser, es oneroso (porque es mensual y de por vida) y no hay hasta el momento cobertura gratuita, solo descuentos posibles a través de las obras sociales.
Finalmente, quienes integran la comisión dispusieron corregir la letra del expediente, incorporando aportes de diversos sectores pero fundamentalmente los de la Sociedad Mendocina de Oftalmología, potenciando los recursos económicos y humanos para las campañas a llevar adelante en consonancia con las jornadas preventivas de las asociaciones médicas como las previstas a nivel nacional, en pos de realizar un abordaje integro en la materia y fortalecer la detección y tratamiento de pacientes.