El encuentro estuvo organizado por la Federación Universitaria de Cuyo y por la Cámara de Diputados de la Provincia, a través de la Escuela de Gobierno y Capacitación Legislativa. Surgió a partir de una propuesta de Paula Zelaya (UCR) y cada viernes tendrá una nueva edición.

Se trata de una herramienta para contribuir a la formación y el desempeño político y representativo de quienes integran el Parlamento de la Federación Universitaria de Cuyo, de manera tal de agregar valor a este cuerpo representativo.

Esta propuesta de Zelaya, además, fue aprobada por Diputados como Resolución, y está destinada precisamente a parlamentarios/as con mandato vigente de la Federación, con el que se pretende crear un espacio de formación para los estudiantes de diferentes claustros que la componen.

El Presidente de Diputados, Andrés Lombardi, participó de la apertura del acto. Sostuvo: “Es un gusto participar. Un gusto en lo personal después de haber transitado y haber empezado mi militancia en la universidad, habiendo formado parte de los centros de estudiantes en Ciencias Económicas, habiendo sido consejero directivo de la facultad en el claustro estudiantil y ahora consejero directivo graduado, pero también haber formado parte de tantos congresos de Federación, tantos debates de la Federación Universitaria de Cuyo, de la Federación Universitaria Argentina, y poder dar un aporte desde la Legislatura, específicamente a través de la Cámara de Diputados. Es como que uno vuelve a las raíces”.

Agregó, a su vez que celebraba que “la Federación Universitaria de Cuyo haya modernizado sus estructuras a partir de la elección directa y la conformación de un parlamento, en nuestras épocas las jornadas de debate más profundas, más trascendentales se daban únicamente una vez al año en la realización de los congresos, y como todos sabrán, pasaba más por la rosca de las nuevas autoridades que por definir un plan de lucha o tener algunas posiciones determinadas con respecto a los temas asociados”.

Asimismo, instó Lombardi “a que tengan un debate serio, entiendo el crisol de ideologías y pensamientos que hay en el marco de la Federación, pero hay varios ejemplos como Paula Zelaya, yo, gobernadores, ex gobernadores, que somos producto de la militancia universitaria. Hoy son dirigentes, probablemente mañana ocupen espacios de mayor responsabilidad y creo que el secreto está en que estén debidamente formados y tengan discusiones de buen nivel político y técnico”.

Seguido de ello, Paula Zelaya agradeció la concurrencia física y por zoom, y destacó “que hayan confiado en esta banca para poder desarrollar este proyecto, tiene que haber un puente de nuestra Casa de las Leyes en la provincia y dentro de la Universidad Pública. Para mí, es un honor en todo sentido por haber pasado por esos espacios, haber sido militante universitaria, estudiante, graduada, y haber podido desempeñarme tanto en espacios gremiales como en espacios colegiados de la UNCuyo y hoy hacer una carrera legislativa”.

Remarcó que “me parece fundamental que podamos trazar estos puentes, dialogar dentro de un ámbito plural, independientemente de a qué partido político pertenecemos sino entendiéndonos como personas” y agregó “así como tenemos una universidad pública que nos brinda esas herramientas gratuitamente, se espera también que en algún momento nosotros lo devolvamos generando este tipo de acciones, que nos hagan mejores personas, mejores como sociedad, con un marco normativo mejor para la sociedad”.

Camila Pessino, de la Federación Universitaria de Cuyo, agradeció el espacio y ponderó los espacios de debate y enseñanza que se generan para poder capacitarse y obtener herramientas necesarias.

Una vez iniciado el Voluntariado, la diputada Paula Zelaya realizó un repaso por los trabajos realizados y los desafíos por delante,  apoyada en la necesidad de trabajar determinados proyectos y temas sobre lo concreto para, a partir de allí, producir esos cambios que se precisan en la sociedad.

Enumeró diversas iniciativas, principalmente las referidas a la igualdad y paridad entre varones y mujeres, pero elevó el debate a aquel sistema sobre el cual se definen casi todos los aspectos y que no consideran los otros géneros sino que todo se define en un sistema binario de géneros. Por lo tanto, la pregunta retórica que expresa es “¿Qué pasa con las diversidades?”.

Zelaya repasó hechos históricos y detalló cuál ha sido el avance en materia de igualdad de derechos para la mujer y cómo, a lo largo de los años, el camino que comenzó a seguirse y a dar sus frutos eran las llamadas “leyes de discriminación positiva”, porque a partir de ellas se visibilizaba el tema, se lograban (y logran hasta hoy) avances que, aunque no son el mejor camino son las únicas que han permitido alcanzar objetivos puntuales.

En este sentido indicó que “las mujeres arrancamos desde la base que no podíamos votar” para luego de muchos años de lucha conseguir el voto femenino “pero sólo podíamos elegir varones”. “Así se gestó también la Ley de Cupo” que demostró avances en la materia para llegar a la Ley de Paridad que tenemos hoy, que aunque fue de discriminación positiva “es la mejor ley que podemos tener hasta ahora”, remarcó.

Al referirse más profundamente sobre este tema subrayó que todavía falta la paridad en ámbitos sindicales, gremiales, deportivos, ejecutivos, medios de comunicación, lo cual responde a que “vivimos en una sociedad patriarcal” pero que poco a poco se van logrando los cambios.

En relación a ello menciona el trabajo que se debe hacer para concientizar y la tarea que realizan los ámbitos legislativos sobre estos temas incluyendo también a los Concejos deliberantes municipales y el propio cuerpo parlamentario que tiene la Federación Universitaria de Cuyo.

Para los casos concretos sostuvo Zelaya que una iniciativa como, por ejemplo, incluir cambiadores en los baños públicos muestra como también puede correrse a la mujer de esas tareas, y también del pensamiento social.

Sintetizó su exposición al mencionar que los poderes legislativos tienen diversos desafíos para lograr esos cambios necesarios. Remarcó la importancia de realizar seguimiento sobre las iniciativas y el trabajo de los distintos niveles de gobierno e ir adecuándose a partir de un trabajo exhaustivo de repaso y nuevas propuestas.

Por último mencionó que muchas veces “funciona mejor trabajar desde abajo hacia arriba, desde los Concejos Deliberantes hacia arriba”, por el caso de determinadas legislaciones que primero se aplicaron a nivel local para luego poder llevar ese debate al orden nacional. Puso de ejemplo la gestión menstrual y decisiones que han tomado en algunos municipios, aunque no así el Congreso de la Nación que tiene entre proyectos a debatir algunos referidos a este tema.