Integrantes de la Comisión de Obras Públicas, Urbanismo y Vivienda, que preside Edgardo González (FdT-PJ), recibieron al diputado Mauricio Torres (UP-FR) autor de una iniciativa que propone denominar “Juan Gualberto García” al tramo de la ruta provincial 98 que une la Laguna del Diamante con la ruta nacional 40. Se explayó, también, en los puntos destacados de este proyecto.

Dijo Torres: “Me parece que es bueno para todos los departamentos el rescate de estas historias. Rescatar esos relatos y esas tradiciones de los pueblos es muy valioso, interesante. Es la historia de los pueblos. Es evitar que se vayan perdiendo”.

Sostuvo, además, que diversas personas e instituciones resaltaron el hecho de salvataje que tuvo García con el piloto francés Henri Guillaumet, en 1930, quien tuvo que aterrizar de emergencia en la Laguna del Diamante, y entre ellos, se encuentran los relatos de Alberto Piatelli, historiador sancarlino, que reconstruyó el camino que realizó García con el piloto herido dando aviso a las autoridades para su posterior rescate.

“En el museo de San Carlos hay un sector con elementos de García. Y en el costado norte de la Laguna, hay una escultura que es el lugar en el que cayó la avioneta”, indicó Torres ante la consulta de los legisladores por los recordatorios que ya se hubiesen realizado. El camino es de ripio desde la ruta nacional 40 hasta la Laguna del Diamante, la ruta provincial 98, y ese tramo que se quiere denominar Juan Gualberto García, comprende unos 65 kilómetros.

La comisión mostró acuerdo con el expediente aunque decidieron realizar algunas consultas con el Ministerio de Cultura y Turismo provincial a fin de subsanar inquietudes referidas a los nuevos nombres en diversos caminos y la jurisdicción para poder realizarlos.

Asimismo, quienes integran la comisión resaltaron el valor de este proyecto e indicaron que luego de las consultas a los organismos mencionados podrían avanzar con la redacción del despacho favorable.

La historia y distinción francesa a Juan Gualberto García

García recibió, en 2001, la Cruz de Caballero de la Legión de Honor y la Medalla de la República de Francia por un gesto que tuvo 71 años antes en las cercanías de la Laguna del Diamante.

El 19 de junio de 1930, Juan Gualberto García de tan solo 14 años, encontró al aviador francés Henri Guillaumet, quien había realizado un vuelo desde Chile a Mendoza al mando de una avioneta Potez 25 de la Compañía Aeropostal, y que debió hacer un aterrizaje forzoso en la Laguna del Diamante. Era invierno y reinaban muy bajas temperaturas y fuertes vientos, se relata en los fundamentos.

El piloto francés sufrió innumerables inclemencias y problemas durante siete días y seis noches, hasta ser encontrado por García, el joven puestero.

Agrega la fundamentación que “Guillaumet integraba la escuadra de pilotos de la aeropostal francesa junto a Jeans Mermoz y Antoine de Saint-Exupéry, el autor de El Principito”.

Luego de encontrar al aviador, García dio aviso a familiares y lo salvaron “de una muerte segura”, se subraya.  El padre informó a la autoridad policial y la novedad fue trasmitida por telégrafo desde Chilecito, la localidad más cercana.

En horas posteriores, un piloto (Antoine de Saint-Exupéry, amigo de Guillaumet) de la empresa francesa aeropostal, voló a San Carlos y recogió al piloto accidentado trasladándolo a la ciudad de Mendoza. El autor de El Principito aterrizó para recogerlo en un potrero a unos pocos metros de la Villa de San Carlos. Mucho después, Saint-Exupéry, escribiría aquella experiencia en su novela Tierra de hombres.

Añaden los fundamentos que “Juan Gualberto García se crió en San Carlos y se mudó a la ciudad de Mendoza. Allí conformó una familia grande. Muchos lo conocieron públicamente y supieron de su historia recién en 2001, cuando el entonces presidente francés, Jacques Chirac, lo condecoró diciendo que era el valiente niño que salvó la vida a un desconocido, el piloto francés Henri Guillaumet”.

Por ello, 71 años después del rescate, García fue homenajeado cuando ya tenía 85 años y era un artesano más en la plaza Independencia de Mendoza, donde ofrecía cuchillos -uno se lo regaló al mandatario galo, Chirac-, cinturones y mates camperos, entre otras.

En el acto desarrollado en Salón Aeronáutico de Le Bourguet, en las afueras de París, Chirac le dijo a García: "En nombre de Francia entera quiero manifestarle este reconocimiento y este agradecimiento". García vestía de riguroso poncho y sombrero gaucho y le regaló a Chirac una artesanía trenzada en cuero y un cuchillo, ambos fabricados con sus propias manos.

García murió en el año 2011, a los 95 años, y sus restos descansan en el cementerio de San Carlos.