Cada 17 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión, con la finalidad de promover la concienciación y los esfuerzos para prevenir, diagnosticar y controlar la hipertensión arterial, condición que constituye el principal factor de riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares.

La hipertensión es una enfermedad que se puede prevenir, pero siempre está latente el riesgo de padecerla. En ese sentido, desde la Junta Médica Laboral de Diputados advierten que son muchos los factores que pueden desencadenarla, como los altos niveles de estrés, los cambios hormonales, dietas con una alta ingesta de sal, el tabaquismo y el sedentarismo, entre otras causas.

La hipertensión arterial es el factor de riesgo cardiovascular más frecuente, y se produce por el aumento sostenido en el tiempo de la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias. Es la principal causa de las enfermedades cardiovasculares que anualmente se cobran la vida de millones de personas en el mundo.

El problema real con la hipertensión, sostienen los especialistas, es que se trata de un enemigo silencioso, que solo cuando la persona ya tiene la tensión muy elevada es cuando se notan los síntomas, como calor corporal, orejas rojas, dolor de cabeza e incluso hay quienes sufren de vértigo a pesar de que sea un síntoma más común cuando la tensión va a la baja.

De allí que las intervenciones en promoción de estilos de vida generan un gran impacto sobre esta enfermedad así como las acciones de diagnóstico oportuno realizando la medición de las cifras de presión arterial.