La decana de la Facultad de Educación de la UNCuyo, Ana Sisti, aseguró que estas titulaciones no existen a nivel nacional y que la Universidad Nacional de Cuyo es la única institución del país que las otorga.

La comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales, que preside Jorge Difonso (UP-FR), realizó una serie de consultas en relación al proyecto de Néstor Parés (MC), por el cual se promueve regular “el ejercicio de Profesor Universitario de Pedagogía Terapéutica en Discapacidad Intelectual, Orientación en Discapacidad Motora, Licenciado en Terapia del Lenguaje y Profesor Universitario en Pedagogía Terapéutica en Discapacidad Visual”.

Por tal motivo, los legisladores recibieron a la decana de la Facultad de Educación de la UNCuyo, Ana Sisti, y a la Mgter. Leticia Vázquez, quienes hicieron un repaso histórico de cómo surge la Facultad y expresaron el por qué de la necesidad de contar con una legislación que regule la actividad.  

Las profesionales, indicaron que cuentan con matrícula provincial pero no a nivel nacional por no encontrarse en el Registro Nacional de Prestadores. “Tenemos matrícula provincial en el ámbito de salud”, dijeron, resaltando que “la denominación de las titulaciones se ha ido aggiornando a lo largo del tiempo al igual que las currículas”.

Indicaron que las carreras tienen alrededor de 300 ingresantes por año y que actualmente, “hay más de 3000 profesionales en el medio, en ejercicio”. En tal sentido, subrayaron que “en esta formación la UNCuyo es la única universidad nacional y Mendoza la única provincia que da estas titulaciones. No existen a nivel nacional, por eso nuestra necesidad de que la Ley tenga el respaldo de la provincia de Mendoza porque justamente es Mendoza la que da esta carrera”.

Señalaron también que por esta iniciativa no sólo se regula el ejercicio profesional, sino que además crea un Consejo Deontológico “que permita un contralor de las actividades profesionales que realizan nuestros egresados”.

En ese sentido, ponderaron que son numerosas las derivaciones que reciben de pediatría y psiquiatría, entre otras especialidades médicas y que por otra parte, “a nivel presupuestario no representaría un problema”.

“Desde el ámbito legal, el objetivo es traccionar en el Registro Nacional de Prestadores, sería un amparo para que se reconozcan nuestras profesiones con su respectivo nomenclador”, dijeron, a lo que añadieron que además, “amplía las posibilidades laborales” de estos profesionales.

En la misma línea, hicieron hincapié en que se trata de títulos universitarios, “donde se ha trabajado con las universidades nacionales que tienen que ver con humanidades y educación. Son títulos que  están avalados por el Ministerio de Educación Nacional”, dijeron.

El proyecto de Ley, además de regular el ejercicio profesional de cada una de las profesiones contempladas prevé sanciones, para lo cual se crea un “Consejo Deontológico de los Profesor Universitario de Pedagogía Terapéutica en Discapacidad Intelectual. Orientación en Discapacidad Motora, del Licenciado en Terapia del Lenguaje y del Profesor Terapeuta de Grado en Deficientes

Visuales que tendrá por finalidad velar para que el ejercicio de la profesión se cumpla dentro de las normas éticas y legales”.

Antes de avanzar con el tratamiento del proyecto, desde la comisión se acordó remitir al Ministerio de Salud el despacho que la comisión de Salud realizó previamente sobre este expediente, a fin de que emita opinión al respecto.