La comisión de Salud de Diputados envió al archivo una serie de proyectos en lo que se definió como una “depuración” de los expedientes, con el objeto de abocarse a iniciativas con viabilidad.
Los proyectos archivados fueron presentados antes de diciembre de 2021 y refieren a asuntos que han sido incluidos en legislaciones ya vigentes o han devenido en virtuales “letras muertas” debido al cambio de contexto. Incluso hay iniciativas cuyas disposiciones están en leyes nacionales, como la de etiquetado frontal de alimentos.
También el listado incluye proyectos de declaración y resolución.
“Hemos hecho un trabajo de clasificación de proyectos que pasarían al archivo”, había adelantado el presidente de la comisión, el radical Daniel Llaver, sobre los más de treinta proyectos.
Algunos de los textos refieren a la emergencia que, en su momento, significó la pandemia de Covid 19 pero el final de la contingencia sanitaria permite, o bien hace necesario su archivo.
También corrieron la misma suerte proyectos que no hayan sido promovidos para su análisis en estos años.
Si bien el reglamento interno de la Cámara de Diputados permite que el presidente de la comisión de Salud archive expedientes con más de dos años de antigüedad, el actual titular de la misma prefirió poner en consideración de quienes la integran el paso al archivo.
Fue entonces por decisión unánime de las diputadas Roxana Escudero (PJ), Elizabeth Crescitelli (UCR) y Stella Huczak (JxL) y los diputados Gabriel Vilche (PRO) y Raúl Villach (UCR) y el mismo Llaver, que los proyectos fueron archivados.