Acto de inauguración

La apertura del acto, del que participaron además de legisladores, los fiscales Omar Palermo y Dante Vega, y la directora de Derechos Humanos de la provincia, María José Ubaldini, estuvo a cargo de Sandra Amaya, quien cantó en lengua Millcayac, seguida por la actriz Mariú Carreras, quien recitó un poema de su libro “Crónica de un ancho presente”.
Paralelamente, se exponía un video de Mariano Espeche, que mostraba las caras de los mendocinos desaparecidos durante la última dictadura militar y los actos realizados por las Madres y la agrupación Hijos, a lo largo de la historia.
El arquitecto Nino Bonoldi, representante de los organismos de Derechos Humanos que formó parte del jurado encargado de seleccionar la obra, señaló que cuando la idea comenzó a concretarse, se eligió esta fecha para la inauguración del mural, pensando .que ya estarían dadas las sentencias en el segundo juicio por delitos de lesa humanidad que se desarrolló en la provincia y que culminó el pasado 6 de octubre con cuatro condenas a prisión perpetua y otra a doce años de cárcel.
“Hoy estamos en esa instancia y la emoción es muy grande”, dijo en su discurso, porque además, “hoy hay infinidad de lugares donde están ellos (los desaparecidos), como que están volviendo a donde los sacaron, superándonos”.
La obra artística, “es una catalización de todo lo que estamos haciendo en nuestra vida, en nuestra lucha. Es un mural que nos pertenece a todos, no a un gobierno”, agregó, mientras adelantaba que hoy se inicia “simbólicamente” el trabajo de la Comisión Provincial por la Memoria, por lo que pidió el apoyo de los Poderes Ejecutivo y Legislativo, para otorgarle presupuesto y un lugar para funcionar, “para rescatar todos los archivos que están dispersos y que necesitamos estén en un solo lugar”.
El dirigente, resaltó que hoy las cosas “vuelven a estar en su lugar”, haciendo referencia a la Justicia, los condenados “y a nosotros, que estamos con más fuerza, más unidos”.
Por su parte, el escritor Rolando Concatti explicó que “la idea fuerte” del mural “no es tanto la memoria de los desaparecidos, lo irreparable, sino la lucha de la resistencia, la reconquista de la democracia y la proyección al futuro de una confianza hacia nosotros y nuestro pueblo”.
“Que la vida se imponga sobre la muerte”, describió, “es una promesa y una celebración”, añadió.
A su turno, el presidente de la Cámara Baja y autor del proyecto que dio origen al concurso, Jorge Tanús, destacó que en esa obra colocada en la pared oeste del nuevo edificio de Diputados, “está la democracia”, al tiempo que destacó que si bien esta es la primer Legislatura del país en contar con una obra de esta naturaleza, “seguramente no será la única”.
En tanto, el diputado Néstor Piedrafita (Nuevo Encuentro), expresó que muchos pueden preguntarse si este es “un tiempo para recordar”, pero cuando se ven las actitudes de “algún periodista”, “dirigente”, “candidatos a Presidente”, un juez federal “que huyó a Chile” (por el caso de Otilio Romano), entre otros hechos, “nos convencemos que es tiempo de hacer memoria, de buscar verdad y justicia”, porque además, “hay muchos otros esperando todavía, aunque algunos ya no están”.
“Esperan los que vieron destrozadas sus familias, los cesanteados, los exonerados, los que vieron a sus amigos convertirse en enemigos”, enfatizó.
“No vencimos la muerte pero sí el olvido”, remarcó, mientras recordaba a Virginia Ogando, una hija de desaparecidos que fue criada por su abuela y que se quitó la vida a los 38 años, después de una larga lucha por reencontrarse con su hermano, nacido en cautiverio.
Finalmente, destacó que pareciera que ahora, “la política de Derechos Humanos se está transformando en una política de Estado. Pareciera que hoy el Nunca Más, está mas cerca”.



Prensa octubre 12