Según Migliozzi, se trata de un presupuesto "adecuado, suficiente" similar al que se ejecutó este año, y adelantó que con los recursos adicionales, se apuntalarán dos aspectos, "las incubadoras de empresas y el desarrollo ganadero. En primer lugar, las incubadoras de empresas porque es una forma de permitir el tránsito desde la informalidad a la formalidad, y en segundo lugar el desarrollo ganadero, porque Mendoza está en condiciones de invertir la situación en la que está".
Además, dijo que con ese presupuesto de 113 millones de pesos, se logra motorizar  el 75% del Producto Bruto de la provincia, a través de la regulación de los mercados, el sostenimiento de precios, el desarrollo agrícola, ganadero e industrial, la promoción de la provincia tanto en el interior como en el exterior y el fomento de los clusters, entre otros aspectos.
Del total presupuestado, poco más del 32% está destinado al Iscamen, el 29,4% a la Dirección de Agricultura y Prevención de Contingencias Climáticas, y el 23% para el área netamente ministerial, entre otras reparticiones.
Con respecto a la asistencia que se brindará a los distintos sectores de la producción, Migliozzi reiteró que el gobierno provincial no subsidiará rentabilidad sino diferencia de costos, indicando que con fondos nacionales, se hará frente al pago de 15 millones de pesos para el sector ajero, que corresponde al 5% de las retenciones que realiza la Nación.
De igual manera para los productores de durazno, el ministro sostuvo que ante los problemas que tiene el sector para la compra de hojalata, el gobierno provincial, a través del Fondo para la Transformación y el Crecimiento, compensará ese costo a cambio de un precio justo al producto.
En cuanto a la ciruela, Migliozzi destacó que se otorgarán 2 millones y medio de pesos  para la construcción de paseras, "lo que resolvería gran parte del problema de precio de la ciruela".
Respecto de la uva, dijo que se intervendrá "activamente" el mercado, aunque todavía no se puede hablar de precio "porque falta todavía el segundo pronóstico de cosecha".
Para las frutas de pepita, como la pera y la manzana, Migliozzi indicó que al igual que en el resto de los casos, se subsidiará la diferencia de costo y no la rentabilidad.
En ese sentido, el subsecretario de Programación Agroalimentaria y Gestión de la Calidad, Pablo Gómez Riera, sostuvo que "los subsidios y créditos serán para que se levanten las cosechas pero  el diagnóstico es que habrán quebrantes en el sector productivo, industrial y comercial", en el próximo año.