En tal sentido, el director del Nosocomio señaló que el incremento de accidentología vial, fundamentalmente los fines de semana, y la violencia social imperante marcan una impronta que desarticulan el normal desenvolvimiento de esa área crítica hospitalaria. No obstante se han incrementado las camas y el 100% de las mismas cuentan con respiradores complementarios.
El segundo inconveniente se presenta con la ocupación de las camas por parte de afiliados de OSEP y PAMI. Al respecto se intensifican las gestiones para reorganizar el sistema. Con otra obras sociales también se tramita el recupero de los servicios prestados en este efector público.
Se reconoció que la máxima necesidad del Central es el aumento de camas para terapia, como también de profesionales terapistas especializados y con experiencia para atender este servicio. Sin embargo, la cantidad de pacientes excedidos no es sistemático y se produce por situaciones eventuales que son atendidos en la medida de lo posible, recargándose el personal médico y de enfermería.
También se intentará coordinar las derivaciones a terapia por parte de médicos que justifiquen con un diagnóstico profesional el traslado de pacientes y no permitir que el tema quede en manos de administrativos del sistema.
El diputado Vilches requirió toda la documentación relacionada con este servicio, con el objeto de prevenir situaciones límites o de catástrofe con la debida anticipación para beneficio de toda la población. La intención final es la de fortalecer en Mendoza al Hospital Central con perspectiva de futuro.