En sus fundamentos, se realiza un análisis escueto de la situación agrícola provincial y cómo ha sido afectada por las últimas contingencias climáticas por todos conocidas, entendiendo que es necesario otorgar el subsidio ya que el costo de poda por hectárea es aproximadamente de $3.000 y que se han considerado y entendido los reclamos de los entes representantes del sector.
Asimismo, se remarca que el Instituto de Desarrollo Rural, en su presentación del Primer Panorama Agrícola del 2014, destaca la gran pérdida que ha tenido la fruta de la provincia de Mendoza, por las contingencias climáticas, la cual se vio afectada además por las condiciones macroeconómicas que impiden un rendimiento acorde al trabajo efectuado y la subsiguiente dificultad de incorporar nuevas inversiones.
Agrega que debido a esta inclemencia se perdieron porcentajes muy importantes de la cosecha de frutas de Mendoza; tal es el caso de la producción de cereza que se perdió prácticamente en su totalidad, pérdidas en la ciruela (90%), durazno para consumo en fresco (85%), durazno con destino industria (66%) y olivo (65%). La manzana y la pera registraron caída en la cosecha del 25% y 30% respectivamente.
Finalmente, se subraya que “es de notar que según el IDR, desde la temporada 2007, la superficie frutícola en plena producción se ha incrementado 25%”; y desde la campaña 2010/11 el olivo en plena producción se ha incrementado un 27%. Sin embargo, en la actual temporada la producción se derrumbó casi un 60% y el principal motivo fueron las heladas tardías registradas en septiembre de 2013.
Prensa julio 16 - subsidio a productores en emergencia
Asimismo, se remarca que el Instituto de Desarrollo Rural, en su presentación del Primer Panorama Agrícola del 2014, destaca la gran pérdida que ha tenido la fruta de la provincia de Mendoza, por las contingencias climáticas, la cual se vio afectada además por las condiciones macroeconómicas que impiden un rendimiento acorde al trabajo efectuado y la subsiguiente dificultad de incorporar nuevas inversiones.
Agrega que debido a esta inclemencia se perdieron porcentajes muy importantes de la cosecha de frutas de Mendoza; tal es el caso de la producción de cereza que se perdió prácticamente en su totalidad, pérdidas en la ciruela (90%), durazno para consumo en fresco (85%), durazno con destino industria (66%) y olivo (65%). La manzana y la pera registraron caída en la cosecha del 25% y 30% respectivamente.
Finalmente, se subraya que “es de notar que según el IDR, desde la temporada 2007, la superficie frutícola en plena producción se ha incrementado 25%”; y desde la campaña 2010/11 el olivo en plena producción se ha incrementado un 27%. Sin embargo, en la actual temporada la producción se derrumbó casi un 60% y el principal motivo fueron las heladas tardías registradas en septiembre de 2013.
Prensa julio 16 - subsidio a productores en emergencia